Cripto: Balancer publica un informe preliminar sobre el hackeo que lo tuvo como objetivo

Balancer acaba de publicar su informe preliminar sobre el ataque que sacudió al protocolo DeFi el 3 de noviembre. Una falla técnica en los pools V2 permitió a los hackers desviar 128 millones de dólares a través de siete blockchains diferentes. Pero la factura real es mucho más alta: el valor total bloqueado (TVL) colapsó un 58% en solo dos días. ¿Cómo pudo un protocolo auditado once veces ser víctima de semejante debacle?

Un fallo microscópico con consecuencias devastadoras

El 3 de noviembre de 2025, Balancer se sumó al exclusivo club de protocolos DeFi víctimas de hacks masivos. ¿El culpable? Un simple error de redondeo escondido en los “composable stable V2 pools”.

Esta falla le dio a los atacantes un camino abierto para manipular batch swaps y drenar la liquidez de manera metódica.

Ethereum fue el más afectado, con 99 millones de dólares robados. Los atacantes luego apuntaron a Base, Polygon, Arbitrum, Optimism, Sonic y Avalanche. ¿Su método? Jugar con los batch swaps para falsear los cálculos de balances y extraer valor antes de que los sistemas detectaran la anomalía.

La reacción de Balancer fue rápida. El equipo suspendió los pools vulnerables minutos después de la detección. Esta intervención evitó que la hemorragia empeorara. Los pools V3 permanecieron completamente intactos, confirmando la solidez de la nueva infraestructura del protocolo.

Los esfuerzos de recuperación avanzan. Los hackers éticos ya han repatriado 33 millones de dólares. Berachain realizó un hard fork y recuperó 12,8 millones, con reembolsos ya en curso. 

StakeWise logró salvar 20 millones mediante sus propias operaciones. El protocolo elogió “la rápida respuesta que evitó una hemorragia mayor”. Pronto se publicará un informe completo con los pasos de recuperación para los usuarios afectados.

El colapso de la confianza cuesta más que el hackeo

Las cifras del TVL cuentan una historia aún más dura. El valor total bloqueado de Balancer literalmente colapsó. Cayó de 443 millones de dólares el 3 de noviembre a solo 186 millones hoy. Una caída vertiginosa del 58% en cuarenta y ocho horas.

Esta caída borra meses de relativa estabilidad. Desde enero de 2025, Balancer ya venía perdiendo terreno, con su TVL habiéndose reducido en más de 1.1 billions. El hackeo simplemente aceleró esta tendencia descendente y ahuyentó a los inversores. La pérdida total ahora supera los 257 millones de dólares al combinar el robo y la fuga de capital.

El token BAL cayó un 6% antes de estabilizarse. Los traders rápidamente reconocieron la resiliencia de la versión 3 del protocolo. Esta resistencia en el precio, más fuerte que la del TVL, muestra cierta confianza del mercado en la capacidad de recuperación de Balancer.

El protocolo ahora impulsa una migración agresiva hacia V3. El equipo también advierte sobre mensajes fraudulentos que aprovechan la confusión posterior al hackeo. Se prometen auditorías más profundas y actualizaciones de código para evitar que la historia se repita.

Este hackeo de 128 millones de dólares lleva a Balancer al segundo lugar en el poco envidiable podio de los mayores hacks DeFi de 2025. Así, el ecosistema supera la marca de 2.2 billions de dólares en pérdidas anuales. 

Un duro recordatorio de que DeFi, a pesar de sus promesas de transparencia y seguridad, sigue siendo un campo minado. La composabilidad, ese principio fundacional que permite apilar protocolos como bloques de Lego, aquí muestra su lado negativo: cuando un eslabón se rompe, toda la cadena tambalea.