Bitcoin Cash sube un 40% y se consolida como la blockchain L1 con mejor rendimiento del año

Bitcoin Cash ha tenido un inicio de año que pocos observadores anticiparon. Mientras la mayoría de las blockchains L1 luchan por mantenerse en pie, BCH avanza con confianza, como si todo el mercado finalmente hubiera decidido reconsiderar su lugar en el panorama cripto. Un ascenso brusco, casi desorientador, que contrasta con la letargia de otras grandes redes.

Un movimiento alcista impulsado por una dinámica de oferta casi ejemplar

Según datos recopilados por el analista Crypto Koryo, Bitcoin Cash ascendió a la cima del rendimiento de las L1 en 2025. Con un aumento cercano al 40%, se distancia claramente de BNB, Hyperliquid, Tron o XRP, cuyos beneficios siguen siendo modestos.

Mientras los ETF de Bitcoin experimentan retiradas masivas por parte de inversores institucionales, BCH se consolida como una de las pocas L1 capaces de mantener un impulso claramente positivo. Mientras tanto, redes más consolidadas como Ethereum, Solana, Avalanche, Cardano o Polkadot sufren caídas que a menudo superan el 50%. Este marcado contraste resalta la nueva atención que Bitcoin Cash ha estado captando en el mercado este año.

El elemento clave parece provenir de la propia estructura de su oferta. No hay desbloqueos de tokens pendientes. No existe una tesorería de fundación que pueda generar una presión de venta masiva. No hay VC al acecho, listos para deshacerse de los tokens ante la menor oportunidad. Toda la oferta ya está en circulación, libre de los pesos institucionales que lastran a muchos otros proyectos. Esta escasez mecánica crea un terreno fértil, casi ideal, para una apreciación sostenible del precio.

De manera notable, esta dinámica se afianza a pesar de que Bitcoin Cash ya no cuenta con una cuenta oficial en X para orquestar su comunicación. Una ausencia que, paradójicamente, refuerza la idea de un movimiento orgánico, guiado por el mercado en lugar de una estrategia de marketing.

El mercado de Bitcoin se prepara para una pausa antes de un posible sprint hacia las seis cifras

Mientras BCH sorprende, el propio Bitcoin podría experimentar un interludio más clásico. Según el trader Michaël van de Poppe, el escenario más probable implica una corrección técnica hasta los 87.000 dólares. Una breve corrección diseñada para eliminar excesos antes de la reunión de la Fed y dar al mercado el oxígeno necesario para su próximo impulso.

En su análisis, todo gira en torno a dos niveles: 86.000 dólares como soporte vital y 92.000 dólares como pivote alcista. Un rebote claro por encima de este último umbral podría impulsar a BTC hasta los 100.000 dólares en una o dos semanas.

Un timing que coincidiría con un entorno macro más favorable, marcado por un endurecimiento del quantitative tightening, las primeras perspectivas de recortes de tasas y una nueva creación monetaria expansiva. Pero la cautela sigue siendo necesaria. Una ruptura por debajo de los 86.000 dólares o la incapacidad de recuperar los 92.000 dólares invalidaría este escenario, dejando la puerta abierta a una deriva hacia los 80.000 dólares.